10 de diciembre: día del trabajador social

11/12/2017
Trabajadores sociales

En un nuevo aniversario del Día del Trabajador Social y próximos al tercer año de la promulgación de la Ley Federal de Trabajo Social, Bárbara García Godoy, Presidenta de la Federación Argentina de Unidades Académicas de Trabajo Social (FAUATS), realizó un análisis sobre los desafíos de la profesión.

El contexto que hizo posible la sanción de la Ley Federal de Trabajo Social Nº 27072, la cual consagró derechos peleados largamente por nuestras organizaciones profesionales y puso como piso de la formación la universitaria, ha cambiado sustancialmente.

“Estos tiempos se caracterizan por una fuerte transferencia de recursos a los sectores más ricos, por la pérdida de soberanía económica y política, el avasallamiento de instituciones democráticas, el incremento de acciones represivas sobre los sectores más vulnerables, el silenciamiento y persecución de las voces críticas, la criminalización de la protesta social y el desmantelamiento de áreas del Estado, a partir de despidos, quita de presupuesto y/o produciendo vaciamiento a través de la inacción en muchos casos”, analiza Godoy.

“Las instituciones en las que mayoritariamente los/as trabajadores/as sociales nos desempeñamos se encuentran “estalladas”, acotadas en sus recursos y desbordadas en términos organizacionales, y es en ellas que se produce el encuentro con sujetos ‘inesperados’”, analiza la Presidenta y agrega “Instituciones y sujetos se encuentran ambos devastados y allí el Trabajo Social tiene su tarea. El reconocimiento del otro como tal adquiere particular relevancia en estos tiempos”.

“Las unidades académicas de Trabajo Social organizadas venimos dando pelea. En el plano de la formación, podemos señalar las acciones de defensa por la universidad pública y gratuita, las búsquedas para producir explicaciones e intervenciones que mejoren las condiciones en que desarrollan su vida los sectores cuyos derechos están siendo vulnerados o para desentrañar los mecanismos y las políticas que acrecientan las desigualdades”

En este sentido, Godoy menciona que “además, es importante resaltar los encuentros académicos e intersectoriales que promueven las construcciones de sentido colectivas, las revisiones de programas y planes de estudios, la vigilancia epistemológica para que el marco de los derechos humanos constituya la base de las mallas curriculares, la inclusión de la perspectiva de género e incluso, en algunos casos, de perspectivas decoloniales y/o post coloniales”.

Las intervenciones del Trabajo Social en los diversos campos son amplias y diversas. La mayoría de ellas intentan abordar los problemas sociales con rigurosidad y compromiso con el otro. Hay necesidad de encontrar espacios que permitan pensar juntos estrategias para resistir el desmantelamiento de lo público estatal, y para defender la libertad y autonomía del ejercicio profesional”.

“En el contexto político actual tenemos que poder dar un salto importante y “descentrarnos” como profesión, lo que no significa de ninguna manera dejar de lado los debates en torno a nuestras construcciones disciplinarias o ciertas luchas más corporativas, pero sí poder ubicarnos y articular con otros en nuestra condición de trabajadores pertenecientes a un campo más amplio… que es el campo popular. Como actores de la arena pública, éste es el eje que nos tiene que guiar desde dónde construir y hacia dónde ir”, finalizó.