Advierten que también jugos y aguas saborizadas dañan los dientes

08/05/2025
Odontologxs

Una reciente investigación de la Facultad de Odontología de la Universidad Nacional de La Plata (FOLP) encendió una señal de alarma sobre el consumo habitual de bebidas comerciales sin alcohol, como gaseosas, jugos preparados y aguas saborizadas. Según el estudio, estos productos no solo contienen altos niveles de acidez, sino que esa característica los convierte en una amenaza directa para la salud dental, particularmente para el esmalte, la capa protectora externa de los dientes.

El trabajo fue impulsado por la cátedra de Histología y Embriología de la FOLP y dirigido por el decano, Dr. Gabriel Lazo, con la participación de la secretaria de Ciencia y Técnica, Andrea Tanevitch. A través de un estudio in vitro se comprobó que estos líquidos, muy consumidos sobre todo entre niños y adolescentes, presentan valores de pH extremadamente bajos —en torno a 3 para las gaseosas tipo cola y entre 3,5 y 3,7 para jugos y aguas saborizadas— cuando el pH bucal normal ronda entre 6 y 7. Esa diferencia significa que su ingesta habitual puede erosionar el esmalte dental, debilitando la resistencia de los dientes y favoreciendo la aparición de caries.

“Uno no repara en eso, pero esa alteración conlleva a una descalcificación de los dientes que muchas veces termina en la formación de caries”, advirtió el Dr. Lazo, quien también llamó a tomar conciencia sobre lo que se consume diariamente. El decano también señaló la gravedad del problema en contextos de pobreza estructural: “En muchos países llegan las gaseosas, pero no la leche. Es importante fomentar un cambio de hábitos para evitar la destrucción dental temprana”.

Los investigadores utilizaron microscopía electrónica de barrido para observar las consecuencias de estas bebidas en el esmalte. “Se vieron alteraciones en su estructura, disminución en la dureza superficial y pérdida de calcio”, explicó Tanevitch. Además, destacó el valor de este estudio como herramienta de prevención y educación, especialmente para padres, escuelas y profesionales de la salud.

El mensaje final del equipo es claro: no todas las bebidas que parecen inofensivas lo son. Las aguas saborizadas y jugos industriales, muchas veces presentados como opciones saludables, pueden ser igual de perjudiciales que una gaseosa. Por eso, recomiendan revisar los hábitos de consumo y promover una dieta que priorice la salud bucal desde la infancia.