Arquitectos opinan sobre el debate de adoquines en La Plata

09/11/2018
Arquitectos

La Plata es conocida por ser la ciudad de las diagonales, las baldosas flojas y los adoquines. En este sentido, los Arquitectos se sumaron al debate de los platenses. Preservar el patrimonio ó taparlos.

En la ciudad de La Plata se generó un gran revuelo cuando desde la Municipalidad anunciaron que taparían ciertas calles adoquinadas. Esto no causó gracia desde “Defendamos La Plata”, asociación que prioriza el patrimonio cultural.

En este sentido, desde el Colegio de Arquitectos del Distrito de La Plata mediaron el debate. Jorge Martegani, secretario del Colegio aseguró que el tema del debate por los adoquines no puede estar circunscripto al debate entre quienes están a favor o no. “Ninguna de las dos posiciones es buena si no se analiza la cuestión de manera integral y teniendo en cuenta la movilidad de la ciudad”.

Para el profesional hay una falta de equipos técnicos y supervisores capacitados para mantener en condiciones los empedrados. “No todas las calles están de la misma manera, pero no se puede dejar el tránsito librado al azar, ni tampoco descuidar la protección patrimonial”.

En este sentido, el profesional consideró que “los adoquines quedaron peor de lo que estaban y tampoco se mejoró la circulación del tránsito”, además sostuvo que el tema debe estudiarse a través de varias miradas para lograr un equilibrio entre los conceptos de preservación patrimonial, seguridad vial y crecimiento de la ciudad.

Pedro Delheye, miembro de Consejo Internacional de monumentos y sitios (ICOMOS), estuvo en sintonía a su colega ya que afirmó que “el Concejo Deliberante nunca actuó en defensa del patrimonio, el gran problema es que en la Ciudad no hay bienes protegidos”.

El Secretario propuso un análisis integral para determinar qué calles se pueden mantener en su estado original para que, por ejemplo, ese recurso genere otra vinculación con el auto, como favorecer el tránsito a menor velocidad. Al a vez estimó que se pueden fortalecer otras vías para la circulación rápida.

En relación al mito de que los adoquines ayudan a que la ciudad no se inunde por su absorción, Martegani sostuvo que “los problemas de inundación de la ciudad tienen que ver con la cuenca alta, ya no se absorbe en las afueras, poco cambiaría dejar el empedrado por su capacidad de absorción si no se modifican las veredas y hasta las viviendas”.