Avances Prometedores en el Tratamiento del Dolor Crónico

04/12/2023
Médicxs

La autoridad regulatoria de medicamentos argentina, ANMAT, dio luz verde a un ensayo clínico para evaluar un potencial medicamento contra el dolor crónico. Denominado IMT504, este compuesto sintético busca ser una vacuna terapéutica al interactuar con el sistema inmunológico del cuerpo humano para prevenir la generación del dolor.

El IMT504, desarrollado por el investigador del Conicet, Alejandro Montaner, y su equipo en el Instituto de Ciencia y Tecnología “César Milstein”, ha mostrado efectividad en estudios preclínicos con animales. La propuesta es innovadora, ya que se aparta de los enfoques convencionales, como los opioides, que actúan sobre los receptores opioides del sistema nervioso.

El dolor crónico afecta al 30% de la población mundial, siendo un desafío médico significativo. En Argentina, los esfuerzos no solo se centran en este prometedor medicamento, sino también en el desarrollo de políticas para abordar la escasez de medicamentos, según lo anunciado por el Ministerio de Salud.

Es crucial destacar que la automedicación debe evitarse, subrayan los expertos en medicina del dolor. La calidad de vida de los pacientes depende de seguir las recomendaciones profesionales y optar por tratamientos seguros.

El IMT504, patentado en Estados Unidos, se encuentra en una etapa clave. La empresa Immunalgia Therapeutics, liderada por Montaner y su equipo, espera demostrar su eficacia y seguridad a través de un ensayo clínico de fase I con personas sanas. Posteriormente, la fase II se enfocará en el Síndrome de Dolor Regional Complejo, una afección dolorosa sin tratamiento específico hasta ahora.

Con el respaldo financiero de instituciones como la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación, y la participación del Laboratorio Cassará y la empresa Microsules, el IMT504 representa una esperanza para aquellos que padecen dolores crónicos. Su enfoque dual, despertando células para actuar en el foco del dolor y interactuando con receptores opioides, podría ofrecer una alternativa con menos efectos adversos que los medicamentos convencionales.

Este paso audaz en la investigación médica posiciona a Argentina como pionera en la búsqueda de soluciones innovadoras para abordar el dolor crónico, un desafío global que afecta a millones de personas en todo el mundo.