En ese sentido aclararon que «los medicamentos que se entregaron a los beneficiarios del PAMI durante los meses de septiembre, octubre y noviembre, ya fueron pagados con recursos de los profesionales, sin respaldo de nadie, ni los laboratorios, ni la Obra Social».
Es decir que son las propias farmacias las que están solventando económicamente la prestación para la obra social de los jubilados nacionales, que por el volumen que representa se vuelve inviable si no hay una normalización de las deudas.
«A muchísimas farmacias ya le están cortando las cuentas de sus droguerías y los dejan sin reposición de medicamentos para atender a sus pacientes, sean o no pacientes del PAMI», a pesar de lo cual «los farmacéuticos argentinos sostienen la prestación de la obra social más importante del país con dinero de sus bolsillos».
Desde las entidades farmacéuticas remarcaron que «a pesar de los intentos de una nueva gestión de PAMI por mejorar el servicio a los jubilados, no se avanzó nada sobre el tema medicamentos, a pesar de haber esperado durante todo un año».
Para intentar destrabar la situación, este martes habrá una reunión con el titular del PAMI, Carlos Regazzoni y los profesionales indicaron que «tenemos la expectativa de conocer cuáles son las propuestas o alternativas que se barajan, para encontrar un camino que nos permita suscribir un nuevo convenio entre el Estado, las Entidades Nacionales representativas de las farmacias y los laboratorios, que contemple el bienestar de todos nuestros pacientes y la sustentabilidad de las farmacias».