¿Cómo cuidar a las mascotas durante la cuarentena?

06/04/2020
Veterinarios

La Facultad de Ciencias Veterinarias de la UBA brindó recomendaciones para cuidar la salud de perros y gatos durante el aislamiento social, preventivo y obligatorio ya que también ellos están afectados.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE), los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) y la Asociación Mundial de Veterinarios de Pequeños Animales (WSAVA), hasta el momento no hay evidencia científica de que los perros o gatos puedan transmitir el virus causante de Covid-19.

Sin embargo, desde la Secretaría de Extensión de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la UBA compartieron información acerca de la convivencia con perros y gatos durante el periodo de aislamiento preventivo y obligatorio por la Pandemia del Coronavirus.

Según expresaron, “es importante que conozcamos las medidas locales de prevención y las recomendaciones del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación para con los animales de compañía” ya que los animales son especies distintas y como tales tienen sus propias necesidades de tiempo, espacio, alimentación y socialización” por lo que es posible que se observen “actitudes que antes no veíamos en ellos”

Sucede que en estos días de aislamiento social preventivo y obligatorio, “sus rutinas, al igual que las nuestras, se han modificado. Hay que entender que perros y gatos son especies distintas y, como tal, tienen sus propias necesidades de tiempo, espacio, alimentación y socialización”, afirmaron.

Ante esto, sugieren algunos consejos para acercarse a una mejor convivencia:

Generar rutinas de salida. Intentar sacarlo siempre en el mismo horario, siguiendo las recomendaciones del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación.

Generar momentos y espacios de juego. También pautar horarios para llevarlos a cabo. Presentar alternativas de juego diferentes cada 3 o 4 días. Los juegos deben ser cortos en tiempo, de no más de 10 minutos cada vez.

Debido al cambio en la rutina, puede aumentar la ansiedad. Para este punto en particular, la recomendación es no estar todo el tiempo pendientes de ellos.

No realizar cambios en la dieta sin hablarlo previamente con el veterinario.

Intentar no tomar contacto con ellos si estamos nerviosos o alterados.

No generar hábitos nuevos que después nos resulten incompatibles con la forma en la que buscamos convivir con ellos, por ejemplo, dejarlos subir como “permitido” durante este aislamiento a sillones, camas o permitirles comer en lugares distintos, cosa que después, en el retorno a la rutina no estamos dispuestos a tolerar.

No acudir al veterinario, excepto por urgencias. Cada consultorio veterinario tiene un protocolo de atención, por eso es de suma importancia que se comuniquen antes de ir y sigan sus recomendaciones.