La actual conducción gestiona el Colegio desde hace siete años y es una institución que nace, en principio, para habilitar el ejercicio profesional pero que genera una serie de acciones y ejes de trabajo en función de las condiciones laborales del ejercicio profesional “como instalar al Colegio como un actor político capaz de asesorar, vincularse con los distintos organismos del Estado en función de las mejoras de las condiciones de vida de la población con la que trabajamos”, puntualizó la Presidenta.
Siguiendo con la misma cuestión, se destaca que la actualización profesional que llevan a cabo desde el Colegio es no arancelada, característica definida como “fundamental” por la referente, ya que “entendemos al conocimiento como no mercantilizable y creemos que es posible tener una línea en toda la provincia con el aporte de una matrícula que es accesible”, siendo actividades abiertas para otros profesionales y para estudiantes de trabajo social.
“Con las universidades tenemos una agenda de trabajo en común y hemos recuperado un conjunto de temas que son comunes y uno de ellos tiene que ver con la situación de formación de grado y crecer en términos de la jerarquización de la formación. Trabajamos siempre para que hayas más puentes y vínculos para una formación sólida y mejores posibilidades en el mercado de trabajo”, aseguró la referente.