Dura réplica a las palabras del Presidente de la Academia Nacional de Medicina

13/09/2016
Farmacéuticos

El Dr. Manuel  Martí había afirmado que las farmacias son atendidas por personal no profesional, lo que le valió una respuesta del Colegio de Farmaceúticos de la Provincia de Buenos Aires.

A continuación el comunicado de la entidad que preside Isabel Reinoso, en el que responden al  presidente de la Academia Nacional de Medicina, Manuel Martí:

Los farmacéuticos de la provincia de Buenos Aires leemos con preocupación lo que varios medios de comunicación reseñan como una postura de la Academia que Usted preside.

 

De ser ciertas, tales opiniones reflejan un enorme desconocimiento de las leyes vigentes o constituyen un prejuicio sobre nuestra profesión.

 

De acuerdo a las leyes 10606 y 11405, el único responsable de la dispensa de medicamentos en la provincia de Buenos Aires es el Director Técnico de la Farmacia, quién responde por los colegas y dependientes a su cargo.

 

Le recordamos que la dispensa es acto exclusivo del profesional farmacéutico, en un establecimiento habilitado por autoridad sanitaria, y consiste en la interpretación de una receta, la entrega oportuna del medicamento correcto y el asesoramiento pertinente sobre forma de uso, interacciones, efectos adversos, etc.

 

Afirmar que “…la farmacia es atendida habitualmente por personal no profesional” es tan temerario como advertir que la mayoría de las recetas las confecciona una secretaria o que la lapicera del médico la maneja el laboratorio o que algunos médicos viajan a sus congresos gracias a sus recetas.

 

Bastardear el desempeño de otros profesionales y arrogarse la incumbencia reservada a estos, convierte el debate sobre las leyes que la Nación necesita, en una discusión ajena al nivel académico de la Institución que usted preside.

 

Lo invitamos a dialogar sobre una normativa que perfeccione la práctica profesional de todo el equipo de salud al servicio de nuestros pacientes.

 

Para finalizar, invitamos a revisar los informes de la Organización Mundial de la Salud y otras instituciones académicas sobre cómo el uso de la Denominación Común Internacional que “disminuye errores de prescripción y aumenta la accesibilidad al medicamento”.