El 76% de los profesionales ve la coyuntura económica como una amenaza

03/11/2025
CGP

El Informe CGP 2025 revela un clima de creciente preocupación entre los profesionales argentinos. La inestabilidad económica, los cambios normativos y la falta de previsibilidad aparecen como los principales factores que amenazan el ejercicio de las profesiones, aun en un sector que conserva altos niveles de formación y compromiso vocacional.

La profesión elegida, para la mayoría de los argentinos, sigue siendo un rasgo identitario: un camino de desarrollo personal y aporte social. Sin embargo, el contexto económico actual está poniendo esa vocación a prueba. Según el estudio elaborado por la Confederación General de Profesionales (CGP), el 76% de los consultados considera que la situación económica representa una amenaza significativa o moderada para su futuro laboral.

El dato refleja un estado de ánimo colectivo marcado por la incertidumbre. Los profesionales, históricamente asociados a la estabilidad y el ascenso social, enfrentan hoy un escenario cambiante, con reglas laborales difusas, ingresos desactualizados y exigencias de reconversión constante.

Aun así, la confianza en el valor de la formación se mantiene firme. Tres de cada cuatro profesionales realizaron algún tipo de posgrado o especialización en los últimos cinco años, la mayoría en universidades públicas. Esa apuesta al conocimiento aparece como la principal estrategia frente a un entorno inestable. “La capacitación continua ya no es una ventaja competitiva: es una forma de supervivencia”, resume uno de los testimonios incluidos en el informe.

A pesar del esfuerzo, los caminos laborales muestran una gran dispersión. Solo el 19% afirma tener un plan de carrera definido, mientras que el 44% cambió de empleo o de modalidad laboral en el último año. El resto transita un presente flexible, muchas veces improvisado, entre el pluriempleo, el trabajo remoto y la búsqueda de nuevos ingresos.

El estudio señala que la inestabilidad económica y los cambios en las políticas públicas son percibidos como las principales amenazas, seguidas por la saturación de ciertos mercados profesionales y el impacto de la automatización. En particular, el avance de la inteligencia artificial despierta sentimientos mixtos: preocupación por la pérdida de tareas rutinarias, pero también expectativas sobre nuevos nichos de especialización y servicios basados en conocimiento avanzado.

“El escenario actual no desalienta la vocación, pero obliga a repensar qué significa ser profesional en la Argentina de hoy. La estabilidad ya no es un rasgo del trabajo calificado”, indica el Informe CGP 2025

En este contexto, el bienestar y la salud mental también se vuelven temas centrales. El 63% de los encuestados declaró sentir niveles altos o moderados de estrés laboral, especialmente quienes combinan múltiples actividades o tienen responsabilidades familiares. El teletrabajo, que se expandió durante la pandemia y se consolidó luego, generó ventajas en materia de flexibilidad, pero también difuminó los límites entre la vida personal y profesional.

El informe advierte que la incertidumbre no afecta a todos por igual: los profesionales jóvenes y los independientes son los más vulnerables ante la volatilidad económica. A diferencia de quienes se desempeñan en cargos públicos o en grandes empresas, estos grupos carecen de respaldo institucional y ven limitadas sus posibilidades de planificación a largo plazo.

En términos generales, los profesionales siguen valorando su rol social y mantienen un fuerte sentido de pertenencia hacia su campo disciplinar. Sin embargo, demandan mayor acompañamiento de los colegios, consejos y federaciones para enfrentar los desafíos de un mercado que cambia con rapidez. Entre las acciones propuestas se destacan programas de mentoría, capacitación en nuevas tecnologías, redes de cooperación y asesoramiento legal y tributario.

El informe concluye que la vocación no se ha perdido, pero está atravesada por un sentimiento de vulnerabilidad que redefine el vínculo entre los profesionales y su trabajo. En palabras de uno de los encuestados, “no se trata de dejar de hacer lo que uno ama, sino de poder hacerlo en condiciones dignas y sostenibles”.

La foto que ofrece el CGP 2025 es la de una comunidad profesional que conserva su compromiso con el conocimiento y el servicio, pero que necesita previsibilidad para volver a proyectar futuro. La vocación sigue viva; lo que falta es un horizonte más estable donde esa vocación pueda sostenerse.