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Esta nueva ley beneficiará a casi dos millones y medio de jubilados, al reajustar sus haberes de acuerdo a los montos dictaminados en fallos anteriores, que sentaron jurisprudencia. Evitando así, los juicios masivos al Estado por reclamos de haberes mal ajustados.
Por otra parte, el mandatario argentino, también reglamentó la ley de sinceramiento fiscal, comúnmente llamada “blanqueo de capitales”, que permite poner a derecho todo bien o capital, que se encuentre en territorio nacional o extranjero, sin la necesidad de justificar o certificar el origen de esos bienes o capitales.
Esta Ley de “Blanqueo”, además, permite el acceso a la compra de bonos y títulos del Banco Central de la Nación.
El Gobierno Nacional, apoyó esta normativa con el fin de aumentar la recaudación impositiva, así como también la incrementación del valor monetario y capital en las reservas nacionales, que respaldarán el pago de haberes, a los beneficiarios de la ANSES.
