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El presidente del Colegio de Ingenieros de la provincia de Buenos Aires, Norberto Beliera, se manifestó a favor de una transición energética que pase de los combustibles fósiles a las energías renovables, pero advirtió que para esos hacen falta «tiempo y recursos», por lo que destacó la potencialidad de desarrollo de la explotación petrolera Off Shore en las costas bonaerenses.
En diálogo con Radio La Plata, Beliera rechazó las críticas de sectores ambientalistas y aseguro que los estudios de impacto ambiental son los que deben determinar si entre los pros y las contras las condiciones son aptas para avanzar con la explotación de gas y petróleo y recordó que 10 años atrás los mismos sectores criticaban Vaca Muerta, pero no se materializó ninguna de las catástrofes ambientales que anunciaban.
«Lo que si ocurrió es que se generaron cientos y cientos de puestos de trabajo bien remunerado y Neuquén avanzó en el proceso de sustitución de importaciones, Gracias a Vaca Muerta hoy Argentina exporta gas a Chile, con la obvia entrada de divisas a raíz de esto, que tanto necesita nuestro país”, destacó el dirigente profesional.
Además, el presidente del CIPBA explicó que en Santa Cruz y Tierra del Fuego ya funcionan varias plataformas off shore, como las que se instalarían en la zona de Mar del Plata, y remarcó que a nivel mundial, países como Noruega o Australia son emblemas de ese tipo de extracción, sin que se registre ninguna catástrofe ambiental.
El ingeniero reconoció que no se puede asegurar con absoluta certeza que no se producirá un derrame de petróleo si se empieza a producir en la zona, pero resaltó que de acuerdo al movimiento de las corrientes oceánicas que atraviesan la región, 300 kilómetros mar adentro, sería imposible que la mancha tocará las cosas argentinas, por lo que el riesgo de contaminación de las playas es nulo.
Finalmente Beliera recordó que los acuerdos que pusieron en marcha la exploración en las costas bonaerenses fueron iniciados durante la gestión de Mauricio Macri, por lo que las calificó como una verdadera política de Estado, que debería estar por encima de las discusiones políticas y las intenciones electorales de algunos sectores.
