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La Confederación General de Profesionales (CGP) expresó un enérgico repudio a las declaraciones realizadas por la delegación del Gobierno nacional ante la Comisión Contra la Tortura de la ONU, encabezada por el subsecretario de Derechos Humanos, Alberto Baños, que por primera vez en un foro internacional puso en duda de manera oficial la cifra de desaparecidos durante la útima dictadura cívico militar.
Según denunció la entidad, las afirmaciones vertidas por los funcionarios —entre ellos los subsecretarios de Asuntos Penitenciarios y de Asuntos Legales del Ministerio de Seguridad— constituyen una negación agraviante respecto de los 30.000 detenidos-desaparecidos, cifra emblemática en la lucha por Memoria, Verdad y Justicia.
Desde la Secretaría de Derechos Humanos de la CGP señalaron que los dichos oficiales no solo ofenden el conocimiento histórico y judicial acumulado sobre el Terrorismo de Estado, sino también la lucha sostenida por décadas por organizaciones como Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, el CELS, la APDH, el SERPAJ y referentes de derechos humanos como Adolfo Pérez Esquivel.
El organismo recordó que, si bien el número exacto de víctimas de desaparición forzada no puede establecerse con precisión matemática debido al accionar clandestino y el silencio impuesto por la dictadura cívico-militar, la cifra de 30.000 fue reconocida internacionalmente para dimensionar la magnitud del genocidio.
La CGP advirtió que la postura adoptada por la delegación argentina ante la ONU habría buscado desviar el foco de las cuestiones que sí debía explicar ante el Comité Contra la Tortura: la reducción del espacio cívico, el aumento de la represión a la protesta social, el endurecimiento del sistema penitenciario y las denuncias sobre un presunto plan de inteligencia estatal destinado a perseguir periodistas, economistas, dirigentes sociales y actores políticos críticos.
En su posicionamiento público, la Confederación subrayó que las diferencias entre cifras oficiales y la cifra histórica sostenida por los organismos no disminuyen la gravedad de los crímenes cometidos por la última dictadura: torturas, asesinatos, detenciones ilegales, desapariciones forzadas y el robo sistemático de bebés, muchos de los cuales aún no han recuperado su identidad. “Repugna nuestra dignidad como seres humanos que más de trescientas identidades sigan sin ser restituidas”, expresaron.
Finalmente, la CGP reafirmó su compromiso con la defensa irrestricta del Estado democrático de derecho y con la continuidad de la lucha por Memoria, Verdad y Justicia, pilares fundamentales de la vida democrática argentina.
La CGP repudió el negacionismo del gobierno de Milei by Mundo Profesional
