Mundo Profesional
Sin saber el estado de los fármacos, la DDI secuestró más de un centenar de medicamentos de un supermercado mayorista.
Los allanamientos realizados por la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de la Matanza en los barrios de Gregorio de Laferrere, González Catán y San Justo dejaron el saldo del secuestro de fármacos de origen desconocido.
Los profesionales, que continúan su lucha contra la venta ilegal, aseguran que más allá de la ilegalidad de la venta hay otros riesgos. “No se puede garantizar el origen, procedencia, estado de conservación entonces representa un peligro para la salud. El único que puede garantizar que se haya respetado la cadena de comercialización es la farmacia”, sostuvieron desde el Colegio regional.
En esta línea, agregaron que “el circuito es que un laboratorio le venda a una droguería y ésta a la farmacia, eso es lo legal y lo que preserva en cuanto al origen y la conservación de los medicamentos. Todo lo que está por afuera de ese circuito es ilegal”.
