En el marco de las acciones contra la competencia desleal y el intrusismo, el Colegio de Ópticos de la provincia de Buenos Aires (COPBA), lanzó una campaña para alertar sobre los riesgos del uso de anteojos pregraduados.
«Desde el COPBA creemos que la mejor manera de concientizar a la comunidad sobre el uso correcto de anteojos pregraduados o lentes de contacto es brindándoles información», remarcaron desde esa entidad.
La campaña incluye material que los matriculados pueden descargar para compartir a través de sus redes sociales o imprimir y exhibir directamente en la ópticas para llegar con el mensaje a sus clientes.
Desde el COPBA indicaron que los principales problemas a la hora de utilizar este tipo de anteojos son:
1) La graduación es la misma para ambos ojos y se ajusta por medio del ensayo prueba-error. No corrigen astigmatismo.
2) La corrección es inexacta: el ojo es capaz de soportar múltiples graduaciones dentro de un límite concreto, por lo que es muy fácil corregir de más o de menos, pero no en la medida en que realmente necesitamos.
3) Estos anteojos tienen graduaciones estándar. El material de fabricación no es lente oftálmica; al no tomar en cuenta la distancia existente entre ambos ojos causa en algunos casos intolerancia, que se manifiesta con náuseas, mareos, dolor de cabeza, fatiga ocular, etc.
4) Comprar anteojos pregraduados es como automedicarse.
«Por todas estas razones y muchas más, utilizar este tipo de anteojos te perjudica y pone en peligro tu salud visual», alertaron los profesionales, en un nuevo intento por desalentar la compra de esto elementos en puestos callejeros, ferias o a través de internet.