Plumas de pollo podrían ser la clave para resolver los derrames de petróleo

22/03/2024
Ingenierxs

La industria avícola en Argentina, además de ser una importante generadora de alimentos, también produce grandes volúmenes de plumas como residuo. Sin embargo, este subproducto ha sido históricamente desatendido, representando un grave problema ambiental debido a la escasez de estrategias efectivas para su manejo. No obstante, una investigación liderada por la Dra. Juliana Orjuela Palacio, de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), podría cambiar este panorama.

Orjuela Palacio, investigadora del Centro de Investigación y Desarrollo en Criotecnología de Alimentos (CIDCA) de la UNLP, ha desarrollado esponjas de queratina a partir de las plumas de pollo. Estas esponjas han demostrado una notable capacidad para absorber contaminantes, especialmente hidrocarburos, lo que sugiere que podrían ser una solución eficaz para los derrames de petróleo.

La investigación, parte de la tesis de maestría de Orjuela Palacio, recibió elogios por su originalidad y potencial impacto ambiental positivo. La Dra. Noemí Zaritzky, directora de la investigación, destacó la importancia de este trabajo para mitigar los impactos ambientales causados por derrames industriales.

Las plumas de pollo, que constituyen aproximadamente entre el 5% y el 7% del peso del animal, están compuestas principalmente de queratina, una proteína con propiedades mecánicas y térmicas excepcionales. Este material, que generalmente se desecha o se utiliza mínimamente en la producción de alimentos concentrados para animales, podría convertirse en una valiosa materia prima para la producción de materiales eco-compatibles.

El proceso desarrollado por la investigadora de la Facultad de Ingeniería, implica la obtención de queratina hidrolizada soluble a partir de las plumas de pollo, seguida por la formación de esponjas porosas mediante métodos de desnaturalización y reducción menos contaminantes y más económicos. Estas esponjas han sido probadas con éxito en la absorción de diferentes tipos de derrames de hidrocarburos, tanto en suelos como en fuentes hídricas.

Los resultados de esta investigación sugieren que las esponjas de queratina podrían ser una solución efectiva y sostenible para los derrames de petróleo, al tiempo que contribuyen a la revalorización de un residuo hasta ahora desaprovechado. Además, el proceso de producción de estas esponjas podría ofrecer una alternativa económicamente viable y respetuosa con el medio ambiente para la gestión de residuos en la industria avícola.

Actualmente, Orjuela Palacio y su equipo continúan trabajando en el proceso de reciclado de las esponjas utilizadas, con el objetivo de cerrar el ciclo de producción de manera sostenible y eficiente, y con el objetivo de determinar no solo su vida útil, sino también cual debería ser el destino final de los hidrocarburos recolectados.

Según Orjuela Palacio, este desarrollo tiene la potencialidad de resolver parte de los problemas de cualquier derrame de hidrocarburos sin la necesidad de intervención de otro tipo de equipamiento, sino con la mera aplicación de estas esponjas sobre la superficie afectada.  La clave está en la capacidad de retención del nuevo producto, que supera el 80%, muy por encima de cualquier otro desarrollo similar.

La investigación representa un paso importante hacia una economía más circular y una gestión más responsable de los recursos naturales, demostrando el potencial innovador de la ciencia para abordar los desafíos ambientales del siglo XXI, ya que no solo resuelve el problemas de los derrames, sino que le da un destino útil a residuos de la industriar aviar que de otra manera solo terminarían sumando mayor contaminación.