El Colegio de Obstétricas de la Provincia de Buenos Aires manifestó su profunda preocupación ante la crítica situación que atraviesan las profesionales del servicio de guardia de Tocoginecología del Hospital Dr. Horacio Cestino, en la ciudad de Ensenada.
Mediante una carta formal dirigida al Ministro de Salud bonaerense Nicolás Kreplak, el Consejo Directivo del Distrito I – La Plata expuso su inquietud por las condiciones en las que las licenciadas en obstetricia deben desempeñar su tarea, advirtiendo que esto no solo vulnera su integridad profesional, sino que también pone en riesgo la seguridad de la atención a la población.
En la misiva, el Colegio detalló tres puntos que requieren atención urgente:
1. Déficit de médicos en el servicio:
La falta de médicos en la guardia de Tocoginecología obliga a las obstétricas a asumir responsabilidades que exceden sus incumbencias, como la atención de emergencias sin el respaldo profesional correspondiente. Esta situación compromete la calidad de la atención y expone a las profesionales a escenarios de gran complejidad sin la estructura adecuada.
2. Traslados en ambulancia:
El Colegio reiteró que los traslados en ambulancia no forman parte de las tareas profesionales de las obstétricas. Al ser obligadas a cumplir esta función, las matriculadas quedan expuestas a riesgos civiles, penales y laborales, ya que estas tareas se encuentran fuera de la cobertura de ART y de los seguros profesionales. Por ello, solicitaron la revisión inmediata de esta práctica.
3. Prácticas de IVE/ILE:
Respecto a la Interrupción Voluntaria o Legal del Embarazo, el Colegio recordó que dichas intervenciones no están contempladas dentro de las incumbencias de la profesión según lo establece la Ley 11.745. En este sentido, cualquier acción por fuera de este marco podría constituir mala praxis y dejar sin protección legal ni respaldo institucional a las obstétricas.
Desde la entidad profesional solicitaron al Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires la adopción de medidas urgentes para garantizar el correcto funcionamiento del servicio de guardia y resguardar a quienes, con vocación y compromiso, sostienen la atención de la salud pública.
Finalmente, el Colegio ratificó su compromiso con la defensa del ejercicio profesional en condiciones dignas, seguras y conforme a la normativa vigente, reafirmando la necesidad de proteger tanto a las trabajadoras como a las personas gestantes que requieren atención segura y de calidad.