Cada 17 de diciembre se celebra el día del Contador, en homenaje a la publicación del libro Suma de Aritmética, Geometría, Proporción y Proporcionalidad, escrito por Luca Pacioli, un fraile franciscano y matemático italiano de fines del siglo XV, que sentó las bases del método de «doble entrada», herramienta fundamental para la contabilidad.
Pacioli aconsejaba utilizar cuatro libros: Inventario y Balances, Borrador o Comprobante, Diario y Mayor. Además definió las reglas de la partida doble: no hay deudor sin acreedor; la suma que se adeuda a una o varias cuentas ha de ser igual a lo que se abona; todo el que recibe debe a la persona que da o entrega; todo valor que ingresa es deudor y todo valor que sale es acreedor; toda pérdida es deudora y toda ganancia, acreedora.
La celebración de esta fecha busca reconocer a los contadores por el trabajo que realizan al aplicar e interpretar leyes, normativas, dictámenes, resoluciones contables. Además, estos profesionales manejan la contabilidad de las personas o empresas para realizar informes y ayudan a tomar decisiones.